El primer probiotico 100% a base de esporas.
El uso de esporas en probióticos es muy importante ya que las esporas están diseñadas para sobrevivir a través del sistema gástrico y colonizan bien para producir los efectos necesarios.

Modulación inmune para reducir las alergias y el asma.
Estimulación inmune de linfocitos T y B para combatir resfriados e infecciones.
Disminución de la frecuencia de infecciones del tracto urinario.
Reducción de los efectos secundarios relacionados con antibióticos.
Tratamiento eficaz para el sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado (SIBO).
Disminución de la duración de la diarrea en niños de 3 a 36 meses de edad
Reducción de la incidencia de síndrome del intestino irritable y diarrea.
Respuesta inmune a adenovirus e influenza-A in vitro.
Mejoría en la escala del dolor en pacientes con artritis reumatoide.
Reduce la inflamación asociada con la enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa.
Mejora la digestión de los alimentos y la absorción de nutrientes
Reducción del riesgo de enfermedad cardiovascular.
Reducción del colesterol.
Desintoxicación del tracto intestinal